La Albufera de Valencia. |
El mes de febrero viene señalado en el calendario por las
flechas de Cupido, ya que el 14 es San Valentín, día de los enamorados. Es ésta
una festividad que se celebra en todas las ciudades de España de una manera
diferente, pero siempre muy especial.
En la ciudad de Valencia, los largos paseos por los jardines de la Ciudad de las Artes y las Ciencias y las cenas románticas en los restaurantes de la plaza de la Reina o del Barrio del Carmen son atractivos muy sugerentes que se pueden completar con una estancia en un apartamento en Valencia.
En la conocida como “ciudad de la luz” también existe la posibilidad de alquilar una barca en la Albufera de Valencia. Se trata de una original propuesta que incluye el paseo en barca y una cena para dos bajo la luz de la luna. Disfrutar de un atardecer mientras se paladea la excelente cocina valenciana en buena compañía no tiene precio, y resulta muy romántico.
San Valentín en los Pirineos
Otro lugar muy diferente para celebrar San Valentín en España es la zona de los Pirineos. Tanto los Pirineos aragoneses, como los catalanes o el Pirineo de Andorra, tienen algo en común: un privilegiado entorno natural donde contemplar las fantásticas panorámicas de las montañas cubiertas de nieve y disfrutar de las mejores pistas de esquí. Para disfrutar de un San Valentín nevado, nada mejor que reservar un precioso apartamento en Pirineos, porque no existe nada más romántico que sorprender a tu pareja con una cena junto a la chimenea.
Además, en el Pirineo aragonés existe la posibilidad de poder esquiar bajo las estrellas, ya que la estación de Formigal dispone de una pista de esquí acondicionada para la práctica nocturna de este deporte.
San Valentín en Granada
Granada es un atractivo destino los 365 días del año, pero especialmente cuando llega San Valentín. La ciudad se inunda de parejas que desean visitar la Alhambra o disfrutar de las maravillosas que el Mirador de San Nicolás ofrece.
El casco antiguo de la villa es una zona totalmente mágica, y sus numerosos bares y restaurantes proporcionan un animado ambiente nocturno. Terminar la estancia en Granada con una buena cena es un magnífico plan de San Valentín. Posteriormente se puede visitar alguna de las múltiples y pequeñas tiendas y teterías de origen árabe que se encuentran en sus estrechas callejuelas y que desprenden un encanto singular. La variedad de tés y sus sugerentes aromas encandilan a todo aquel que los haya probado.
España ofrece muchos más románticos destinos para celebrar un San Valentín inolvidable, porque un buen viaje es siempre una excelente elección.
En la ciudad de Valencia, los largos paseos por los jardines de la Ciudad de las Artes y las Ciencias y las cenas románticas en los restaurantes de la plaza de la Reina o del Barrio del Carmen son atractivos muy sugerentes que se pueden completar con una estancia en un apartamento en Valencia.
En la conocida como “ciudad de la luz” también existe la posibilidad de alquilar una barca en la Albufera de Valencia. Se trata de una original propuesta que incluye el paseo en barca y una cena para dos bajo la luz de la luna. Disfrutar de un atardecer mientras se paladea la excelente cocina valenciana en buena compañía no tiene precio, y resulta muy romántico.
San Valentín en los Pirineos
Otro lugar muy diferente para celebrar San Valentín en España es la zona de los Pirineos. Tanto los Pirineos aragoneses, como los catalanes o el Pirineo de Andorra, tienen algo en común: un privilegiado entorno natural donde contemplar las fantásticas panorámicas de las montañas cubiertas de nieve y disfrutar de las mejores pistas de esquí. Para disfrutar de un San Valentín nevado, nada mejor que reservar un precioso apartamento en Pirineos, porque no existe nada más romántico que sorprender a tu pareja con una cena junto a la chimenea.
Además, en el Pirineo aragonés existe la posibilidad de poder esquiar bajo las estrellas, ya que la estación de Formigal dispone de una pista de esquí acondicionada para la práctica nocturna de este deporte.
San Valentín en Granada
Granada es un atractivo destino los 365 días del año, pero especialmente cuando llega San Valentín. La ciudad se inunda de parejas que desean visitar la Alhambra o disfrutar de las maravillosas que el Mirador de San Nicolás ofrece.
El casco antiguo de la villa es una zona totalmente mágica, y sus numerosos bares y restaurantes proporcionan un animado ambiente nocturno. Terminar la estancia en Granada con una buena cena es un magnífico plan de San Valentín. Posteriormente se puede visitar alguna de las múltiples y pequeñas tiendas y teterías de origen árabe que se encuentran en sus estrechas callejuelas y que desprenden un encanto singular. La variedad de tés y sus sugerentes aromas encandilan a todo aquel que los haya probado.
España ofrece muchos más románticos destinos para celebrar un San Valentín inolvidable, porque un buen viaje es siempre una excelente elección.